Protesto, protesto y protesto porque mis alumnos de segundo grado no tienen educación física, no tienen teatro, no tienen música, no tienen biblioteca.
Protesto porque a algunos de mis niños de educación especial no se le quiere asignar un trabajador 1 cuando apenas pueden escribir y no leen por sus discapacidades.
Protesto porque a algunos de mis niños de educación especial no se le quiere asignar un trabajador 1 cuando apenas pueden escribir y no leen por sus discapacidades.
Protesto porque solo tengo 50 minutos para hacer 4 planes, corregir las 20 libretas de cada clase, o sea 80 libretas, entrar las notas al SIE, poner al día a los que se fueron al salón recurso o a tomar sus terapias, atender a padres, corregir exámenes/evaluaciones, preparar material didáctico, tomar las ausencias y entrarlas al SIE, hacer informes, referir a los alumnos a la TS, llenar los récord anecdóticos. Y después de todo eso y lo que se me olvida, nosotros, los maestros, seguimos siendo los culpables.
PROTESTO PORQUE LA ESCUELA PÚBLICA NO ES, LO QUE A MI ENTENDER, DEBERÍA SER. PROTESTO PORQUE MIS NIÑOS DE SEGUNDO GRADO NO SON PRIORIDAD PARA EL SISTEMA. TAL PARECE QUE A QUIÉN ÚNICO LE IMPORTA ES A MÍ.
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